Cuatro ciudades argentinas recibieron la certificación de la Red de Innovación Local (RIL), por realizar avances significativos en sus políticas públicas y estrategias de circularidad, con el propósito de mejorar la calidad de vida de sus habitantes.
“Certifican las ciudades que revalorizan sus recursos, que cuidan el ambiente y que tienen una estrategia avanzada de la gestión de sus residuos y recursos de la ciudad” expresa Sofía Noguer, Coordinadora del Programa Ciudades Circulares de RIL.
La coordinadora del programa además agrega que “certifican aquellas ciudades que apuestan por una economía basada en activos sostenibles ━como los residuos renovables, reutilizables y reciclables ━ y en la maximización de su vida útil”.
Ciudades argentinas certificadas
San Antonio de Areco, en la provincia de Buenos Aires, se destaca por impulsar la economía circular local, a través de la recuperación de residuos sólidos urbanos, un trabajo realizado junto a sus vecinos y vecinas, por medio de las campanas verdes.
Posadas, en la provincia de Misiones, se convirtió en referente regional en la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos, a partir del diseño e implementación de un plan que logró generar un cambio de comportamiento en la población sobre estos temas.
Córdoba, en la provincia de Córdoba, marca tendencia por su estrategia de economía circular que dio como resultado la creación de iniciativas como el primer Juzgado de Faltas Ambiental de Argentina, y el Parque de la Economía Circular, entre otras.
Ciudad de Mendoza, en la provincia de Mendoza, a partir del Plan Ambiental de la Provincia de Mendoza 2016 – 2030, propone potenciar el territorio, a partir de todos los actores que lo habitan: ciudades, empresas, cooperativas y la ciudadanía.
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